La portavoz del Gobierno de Murcia señala que la «línea roja» para la dimisión es el juicio oral
La portavoz del Gobierno de Murcia, Noelia Arroyo, ha afirmado este martes que el presidente autonómico, Pedro Antonio Sánchez, «no está imputado formalmente» en el caso Auditorio y que la «línea roja» en la que considera que tendría que dimitir es si se le abre juicio oral.
En declaraciones a la Cadena Ser, Arroyo ha recordado que la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal cambió el término «imputado» por «investigado» para «delimitar bien las fases del proceso penal», y ahora se habla de «investigado» y «encausado», que es cuando se abre juicio oral «y donde todos los partidos ponen la línea roja».
De este modo, ha defendido que Sánchez no está incumpliendo su palabra por no dimitir de su cargo después de que este lunes el juez instructor del caso Auditorio en el Tribunal Superior de Justicia de Murcia (TSJMU) le citase a declarar como investigado.
«Campaña de persecución y acoso»
Arroyo ha detallado que el pacto de gobierno con Ciudadanos (C’s) habla de dimisión de los cargos cuando se les impute algún delito de corrupción política, y en este caso entienden que Sánchez «no está imputado formalmente, está citado para poder declarar y aclararlo todo».
«Ponemos la línea roja, como el resto de partidos, en la apertura del juicio oral, nunca en el derecho que tienen los ciudadanos de asistir junto a su abogado para dar explicaciones», ha puntualizado.
Para la dirigente, en el caso Auditorio «no se habla de corrupción política» porque nadie ha puesto en duda que «todo el dinero está en la inversión de la obra, el auditorio de Puerto Lumbreras, y lo que puede haber es un «error en un procedimiento administrativo», así que ha pedido «ser justos, por el bien de todos».
En este sentido, ha acusado al PSOE de la Región de haber emprendido una campaña de «persecución y acoso» contra más de 80 cargos del PP, y la Justicia siempre los ha archivado «y nadie ha pedido perdón».